Sabes tan bien como yo, como termina esta
pregunta, ¿a que sí? Seguramente no te la hayas hecho tan directamente, pero
dudo que no hayas pensado nunca que estás en una relación que, sin saber muy
bien cómo se ha convertido sólo en eso.
No digo que tu
pareja de turno, no te haya visto nunca vestida, tampoco exageremos, ni que no paseéis
mirando a la gente por la calle charlando de trivialidades. Hablo de ese
momento en el que te das cuenta de que los planes de futuro son inexistentes,
que sí, que estáis a gusto, pero que el compromiso no llega nunca mientras que
para el sexo siempre es buen momento.
Personalmente no
tengo absolutamente nada contra el sexo, al contrario es uno de los pocos
placeres de la vida gratuitos que quedan y hay que aprovechar!! Jajjaj. El
conflicto aparece cuando tú esperas más y él se conforma con eso. O al revés,
no se me enfaden mis pandoritos.
Habitualmente en
estas situaciones nos vemos más involucradas las mujeres que los hombres,
porque nos cuesta más separar el sexo del amor. No empecéis a pensar que las
mujeres sólo pensamos en altares y anillos porque no es así eh? Hay momentos de
la vida en los que el sexo porque sí está bien, una relación que sabes que no
lleva a nada más, pero en la que estás a gusto porque no esperas palabras de
amor, ni demostraciones de ninguna clase.
Tengo una amiga
que no quiere novios que le prometan amor eterno. Es feliz con su vida
individual, se siente realizada como mujer y el compartir su dicha la hace
infeliz, así que no le parecía mal tener un amigo con el que satisfacer sus
necesidades. Yo le alababa el gusto, oye! si puedes dejar de lado los
sentimientos y no engancharte, ¿por qué no? El problema llegó cuando él quiso
más y ella sabía que no podía dárselo. Muchos hombres, deciden alargar lo
más posible esta situación de comodidad diciéndonos 4 chorradas (sí, no pongas
esa cara porque sabes que caemos con cuatro e incluso con menos) y siguiendo a
lo suyo: sexo sin compromiso.
Mi amiga, quizás
por ser ella como es, pero seguro que mucho por ser del sexo femenino decidió
cortar con esa relación que le satisfacía pero de la que él esperaba un
compromiso que jamás iba llegar. En mi opinión hizo lo correcto, aunque es
cierto que perdió a su cómodo amante fortuito. Conozco a muchas mujeres que han
comenzado una pseudorelación que con el tiempo se ha convertido en eso, amistad
con sexo.
Hace unos meses, involucrada en una pareja
en la que no sabía muy bien a qué atenerme, me pregunté qué es lo que distingue
a unos amigos que se acuestan de una pareja. A priori no hay grandes diferencias,
porque para mí, la persona que comparta mi vida debe ser también mi amigo y,
por supuesto, no concibo una relación amorosa sin sexo. Ahora veo más claro que
la diferencia es el compromiso y no hablo de fidelidad, o respeto (cosa que no
puede faltar tampoco en la amistad), sino en el compromiso de que hay un
proyecto común, sea este cual sea.
Si crees que te estoy hablando de que se
arrodille en medio de un restaurante, con una rosa en la boca y anillo en mano,
no has entendido nada. El compromiso de un futuro, es la idea en la mente de
ambos de que mañana seguiréis juntos, de que en verano pasareis unos días
alejados del bullicio de la ciudad, de que cuando el salario mejore os iréis a
vivir juntos. Un algo, ese no sé qué que hace que tú sepas que él no te quiere
dejar escapar.
¿Sabes de lo que te hablo? ¿O prefieres
seguir llamando amor a algo que es sólo sexo?
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