domingo, 5 de mayo de 2013

Buscando ayuda externa


Vale, ha llegado ese momento. El hombre del que estás completamente enamorada y/o enganchada se ha plantado delante tuyo y te ha dicho las palabras mágicas: “Se acabó”.

Si has tenido suerte te lo habrá dicho clavando sus ojos en los tuyos. Esos ojos en los que tantas veces has descubierto el amor que sentía por ti son ahora fríos e intranspasables. Si eres de las menos afortunadas, habrás descubierto que ya no habrá más mimos ni caricias con él mediante una llamada, un whatsapp o un email.

Sea como fuere, lo cierto es que el mundo se te ha venido encima (o quizás seas tú la que te hundes), todos tus sueños, esperanzas y planes de futuro han acabado de un plumazo y sin que nadie te pida opinión.
En ese instante las reacciones de las personas, son tan diferentes como sus personalidades. Quizás hayas decidido llorar como una magdalena encerrada en tu cuarto, autoflagelándote pensando en su mirada, en su pelo al viento (en este punto, da igual que él sea calvo. Cosas de la imaginación), y en sus maravillosos besos al despertarte.

Personalmente soy de otro tipo de personas. Quizás por las horas que paso frente al ordenador, he convertido a google en la fuente de toda mi sabiduría, así que me senté ante la pantalla en busca de unas respuestas que jamás podría darme un buscador.

Cuando aparece la barra blanca con el cursor ahí parpadeando, te preguntas cómo buscar lo que te inquieta. No te atreves a escribir nada por miedo a no ser lo suficiente precisa en tu búsqueda y cuando te decides a poner “mi novio…” la tecnología te da la solución.

Mi novio no me quiere, mi novio me trata mal, mi novio no me habla, incluso un inquietante mi novio es un zombi, aparecen en la lista de búsquedas de google. Pinchas en una y de una a otra, vas leyendo experiencias de personas que han pasado por algo similar a lo que estás pasando tú ahora. Y entonces, sin darte cuenta, comienzas a encontrar los milagros.

Entre las confesiones de mujeres y hombres que afirman haber tenido la culpa de la ruptura, las que han conseguido volver con ellos, las que han logrado superar el rompimiento de la pareja y ahora son felices de nuevo, aparecen los mensajitos de personas que publican las oraciones mágicas para volver con un ex.

Oraciones que sólo de ojearlas dan miedo. En estos días he visto muchísimos tipos de rezos, peticiones y conjuros con algo en común: que el objeto de deseo sea infeliz sin nuestra presencia. En algunas de ellas se habla de que ese hombre no sea capaz ni de estar con su familia si no está contigo. Sinceramente, no sé si me alegraría de que funcionaran por aquellas que las rezan con toda su fe, o si me da pánico que alguien pueda hacer que seas infeliz de por vida sólo con unas palabras.

Las oraciones deben ser rezadas, algunas 7 días seguidos, otras 9 y otras sólo una, pero en todos los casos después de leerlas hay que publicarlas. Por eso, si algún día entráis en un foro y estáis leyendo el problema de Paco que quiere instalar un juego en el PC y no puede por falta de memoria RAM, no os sorprendáis de que justo debajo aparezca un rezo a San Cipriano. La gente los cuelga donde puede. No hay que culparles!!

Después de los rezos, están los libros. Son quizás más difíciles de conseguir, pero no de conocer ya que en los mismos foros se habla de casi todos ellos. Como recuperar a un hombre en 7 días, como lograr que tu ex caiga rendido a tus pies, como ser una perra asquerosa y que los hombres se maten por ti como una jauría por un chorizo,… Vale, sí, el último no existe pero quizás lo invente yo, visto el éxito del resto.

Esos libros mantienen todos, al igual que las oraciones, un vínculo común. Es el denominado “contacto cero”. Estas dos palabras, creedme, traen por la calle de la amargura a más de una (sí, a mí también ¿qué pasa?). La técnica consiste en desaparecer de la vida, vista e intuición de tu ex. Que él no sepa nada de ti para que si te tiene que echar de menos, que lo haga lo antes posible.

Que digo yo, que siguiendo el sentido común si te ha dicho que pasa de ti en moto, lo normal sería decirle vale, pues adiós y aplicar el contacto cero porque es lo lógico. Pero, si eres mujer y estás leyendo esto, sabes como yo que la lógica a nosotras como que no nos va. ¿Verdad? 

Y le buscas, una y otra vez. Le escribes a ver qué tal le va, aunque le dijiste que de amigos nada de nada, le mandas algún mensaje porque has visto algo que te ha recordado a él y él, a veces te contesta amablemente y otras veces pasa de ti. Lo cual no hace más que hacernos sufrir más, pero ¿y cuándo contesta? Eso es que aún le importamos y que se acuerda de nosotras. Así somos nosotras!!

Quizás por eso, porque somos así, tarotistas, oráculos, pseudopsicólogos, chamanes, y todo tipo de fauna se mezcla en Internet para aprovecharse (en la mayoría de los casos, que me he propuesto ser mejor persona y no generalizar) de las personas que pasan por el desamor. Ahora sólo os queda decidir si creer en ellos o en vosotras y en vuestra capacidad de recuperaros.

Y, ahora os dejo, que me toca la hora de leer la oración de pomba y llamar a Lucinda mi tarotista profesional, para que me diga de que chamán fiarme!! (jijijiji)

No hay comentarios:

Publicar un comentario